
Aunque estemos casi en verano, y aquí en España haga hasta mucho calor, nos vamos a poner el sueter (es una especie de canarismo) o el jersey de Evo Morales. Está claro que si leemos los periódicos de cualquier tendencia o si oímos las radios que normalmente se escuchan, esta medida de ponerse el jersey es la más impopular por mucho que se tilde a Morales de ser un populista. Pero el tema de la nacionalización del subsuelo tine muchas ramificaciones que aquí no podemos incluso soñar (¿o pesadillear?). Empecemos. Todos los países civilizados (y muchos que no) han nacionalizado su subsuelo. Esto es, lo han hecho estatal o nacional como prefiramos denominarlo. Así, que hasta aquí parece todo correcto. Pero hete aquí, que esta nacionalización y renegociación subsiguiente de los contratos ligados al petroleo y gas boliviano ha tropezado con que una de las empresas perjudicadas es española. ¡Pobres!, hemos pensado todos. ¡Van a dejar de ganar tropecientos miles de millones de euros!, clamamos al unísono. O sea que un derecho público, el del estado boliviano, y un derecho privado, el de los contratos de cesión del subsuelo chocan de mala manera. ¿Quién tiene razón?.
La respuesta no es sencilla, pero tampoco es la que han dado todos los medios de comunicación saltando a la yugular de Evo Morales, que ganador de las elecciones democráticas llevadas a cabo en este país, y en cuyo contrato con su ciudadanía, esto es, su programa electoral, llevaba esta medida tan impopular como uno de sus grandes retos (aquí hacemos un parentésis: ¿no parece esto muy similar a lo ocurrido en Palestina? Nos explicamos: todos los gobiernos democráticos apoyaban las elecciones en aquel país, es más tirabamos cohetes de contentos hasta que las electores democráticamente eligieron a Hamás como sus legítimos representantes. Ahora a todos estos países nos parece un desastre. ¿En qué quedamos? ¿O tenemos que enumerar todas las razones que desde hace decenios han hecho de Hamás el partido más votado en 2006?). Hecho el parentésis, vuelvo al tema de Bolivia. Morales y su gobierno quieren gestionar sus recursos naturales. ¿Por qué?.
Primero y último, porque Bolivia es uno de los países más ricos en recursos naturales de América Latina pero es el más pobre. ¿Esto no es suficiente razón como para que quieran progresar, para que quieran gestionar lo que es suyo? Segundo y penúltimo, ¿será porque todos los gurús de los mass media, esos que dicen que es una locura, que van a ser poco competitivos, que van a ir al desastre, piensan que con Repsol, o Agip, o Petrobras, Bolivia va a mejorar, su población va a salir de la pobreza extrema, ...? Creemos que no piensan en eso. Y si alguien todavía piensa que estamos equivocados, nos remitimos a los
indicadores económicos de Bolivia y alrededores y es que, a veces, las cifras cantan. ¿O habría que ir a las cuentas de resultado de esos mass media para ver cuanto dinero se deja en publicidad esas compañías, o ir al accionariado mismo de esas compañías, o a la composición de sus consejos de administración, o a las firmas de nuevos contratos con bancos, aseguradoras, etc...?
Por cierto, en este blog no tenemos ninguna acción bursatil de Repsol, Agip o Petrobras...
Un último apunte: Esto ocurre más en la derecha, pero el espectáculo lamentable de que salgan todos los políticos y líderes de comunicación agitando la bandera española en pos de los pobres de Repsol, es algo que nos hiela el alma. ¿Alguien los ha visto a estos mismos agitando la bandera de la vivienda digna, que también es española porque nos ocurre a nosotros, en alguna de las concentraciones que se están celebrando estos días? Por cierto, la próxima este
domingo a las siete de la tarde en los centros neurálgicos de ciudades españolas. Eso sí, no es obligatorio venir con sueter o jersey. Si eso, traeros alguna protección corporal. Por si acaso.