lunes, septiembre 22, 2008

Sin pensar

No tengo mucho tiempo y los viajes de idas y vueltas han finalizado. Ahora poco a poco me voy dando cuenta de que los viajes de ida son a Madrid. Mi punto y mi radio de circunferencia han cambiado y de esto uno no es consciente hasta que regresa a casa, donde el espejo te reconoce y las maletas se abren para vaciarse. El olor a pimienta es lo que acrecienta ese ritmo de pertenencia, de pertenencia a uno mismo y sus pensamientos. Por suerte, siguen ahí.

2 comentarios:

Blogger Unknown ha dicho...

Bienvenido!

4:51 p. m.  
Blogger Siete ha dicho...

No. Maldigo la pimienta.
:)

4:15 p. m.  

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio