miércoles, mayo 14, 2008

Locución

ejem, ejem,... Me aclaro la garganta antes de empezar el discurrir de hoy. Además tengo fútbol por la noche. Me veo en el abismo de aceptar, incluso oponerme (¿oponerme?) a algún trabajo fijo que podría durar mi vida entera. Es el abismo. Mis viajes me colapsan la mente antes de que se produzcan. La vida no dura mucho, más o menos igual que los amores que se escriben con zapatos de tacón. Fetichismos aparte, sólo quiero respuestas en esta maraña de preguntas que entretiene mi vida, antes de que esta se precipite por ese abismo que siempre me acecha, da igual a qué lado esté del barranco. Quizá es que nunca me importaron los barrancos, sino el vértigo que dan. Ahora preparo mi locución, mi acento, mi cierto hábito de afrancesado proletario totalmente invisible a la masa. Pero de la invisibilidad mejor no hablo ahora o tendré que callar para siempre.

0 comentarios:

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio