Los ejecutivos de televisión y la idiocia

Creemos que este es el único blog del mundo donde esas dos palabras, ejecutivos e idiocia, se pueden ver en la misma frase. Da igual que todos pensemos lo mismo, otra cosa es escribirlo. La perentoria estupidez que reside en los mal llamados ejecutivos de televisión ya se pasa de la raya. El otro día leíamos que a los "mierdas", permitannos la expresión, les deberían dar un carné por puntos. Cada vez que programen, compren, ideen, pero sobre todo, copien un programa, serie o, en definitiva, bodrio, se les quitaría tres puntos. Muchos, si no todos estarían en la cola de alguna ETT por "mierdas". O directamente en la cárcel por no saber conducir con algo de decencia.

Bueno, dejemos la expresión mierdas y utilicemos la expresión ineptos, sin duda mucho más respetuosa. Series como SMS (¿Sin miedo a qué?), Con dos tacones, Los hombres de Paco, Divinos, Fuera de control, Tirando a dar... (ya sabemos que hay muchas más pero perdemos la cuenta) o programas como, en realidad, cualquier reality de dos duros, o peor, los que conllevan la visión de famosos haciendoloquesea. ¿O cuando se van a enterar que el formato Caiga quien Caiga no admite más copias?. Dicen que ahora preparan Mira quién patina o algo así (¿patinar sobre hielo en España? ¿España es un país nórdico?). Tiene cojones. No digamos nada de los programas del corazón, aunque eso es un problema que atañe a todos (hasta al Gobierno). O tanta crítica a las noches de fiesta en la pública y de vez en cuando, nos encontramos con una chorrada parecida en la tele de todos. Menos mal que todo va a cambiar. ¿Hola?. Es el lema de la Sexta, dicen que todo va a cambiar. ¿Con los mismos tipos de toda la vida haciendo lo mismo?.

Buenos intentos como Génesis (no, no pondré como ejemplo SyM) se quedan en nada porque ¿alguien podía aguantar los diálogos para lerdos que había en esa serie?. Y Ana, la bióloga, que dice que ha escrito una serie. Sí, no la hemos visto, pero seamos serios. Lo que pasa es que hay que hacer muchas facturas, punto primero. Segundo, hay que pagar muchos favores. Tercero, la mediocridad está excesivamente bien vista en televisión. Y cuarto, nadie dice nada. Enough.