Temerario, ebrio y sin carnet

Así podríamos definir a más de un político de estas islas. Según los datos de los concejales que rellenan esos plenos, el concejal modelo es aquel de 26 a 45 años sin estudios superiores y que lleva ya cuatro años en el cargo (que gusto, otros cuatro más). Y claro, según los datos, es muy difícil (lógica matemática) que estos señores y señoras saquen de la duda local a los que tienen muy pocas posibilidades de financiación, y que viven sobre todo de las ideas brillantes y curradas. Creo que su función esta sobrevalorada (miren los sueldos), así que nos iría mejor con menos concejales sin estudios e invertir ese dinero en capital humano de verdad, no de pega. Estos concejales de 26 a 45 años tienen en su librito las palabras lealtad y orgullo. Lealtad de pertenecer a un partido que les paga (y de qué manera) y orgullo de no tener esos estudios (para qué quiero esos estudios se preguntan todo el rato).